Monday, January 22, 2007

Tarde de boliche


No había pensado en lo divertido que puede ser jugar boliche hasta que esta tarde jugamos un par de líneas con suerte de novatos. Al llegar y recorrer el lugar empecé a sentir la adrenalina correspondiente, nos asignaron mesa, el grupo se completó en quince minutos, llegó la renta de zapatos -para mí unos del cinco y medio- ¡wow! los zapatos eran fluorescentes -y también muy cómodos-. Nos instalamos en nuestra mesa -tercer piso, uff, el del ambiente familiar, donde sí había lugar, bueno, donde al parecer, jugaban los novatos-; seguimos con la elección de las bolas, las había de todos colores y medidas, luego me di cuenta que los pesos también variaban, tomé la mía -una verde, buena, apropiada para mis dedos y además ligera-, luego vino la discusión: "juguemos con los carriles levantados", "¡sí, sí, es verdad!" "Noooo, así no" -de todos modos los levantamos-, ¿listos? todos a sus lugares, a llenar la pantalla con nombres para el contador electrónico y a tirar...
Las cosas empezaron bien, algun miembro del grupo tenía un tiro mágico, otros mostraban un estilo de tiro más que particular, otros mirábamos con impaciencia los marcadores, otros veían los pinos caer o sostenerse, otros esperaban impacientemente su turno y otros gritábamos las esperadas porras de apoyo para los demás. ¡Fue de lo más divertido!
Hubo duelos por no ser el último en el marcador, otro duelo más por hacer cien puntos por lo menos, otros tantos por hacer sper, chuza, o tiros divertidos...
Fue una gran tarde...
Hubiera querido postear la foto que tomé de mis zapatos, pero me fue imposible por fallas técnicas...
Ojalá sigamos jugando más... me divertí muchísimo...

2 comments:

Anonymous said...

Deberias de poner como quedamos ,despues de todo me costo trabajo ganar

Paola B. Cano said...

Dada la vanidosa petición de Bernardo, voy a comentar que fue precisamente él quien ganó la primera línea -y aprovecho el espacio para expresar mi propia vanidad, yo lo secundé-.
La siguiente línea la ganó Foco con su truco "chuzas consecutivas".